¿Qué aprendizajes puede obtener el niño de este cuento?
El árbol que no quería crecer es lindo y sencillo cuento que permitirá diversos aprendizajes en el niño.
Algunos de esos aprendizajes son:
- Reconocimiento y naturalización de sentimientos y emociones.
- Comprensión de emociones y cambios.
- Capacidad de adaptación.
- El valor de la amistad.
- Utilidad de los recursos naturales.
- Aceptación de cambios y transformaciones.
- Capacidad de análisis, observación, humanización, imaginación, descripción, otros.
- Enriquecimiento de vocabulario.
- Toma de decisiones.
EL ÁRBOL QUE NO QUERÍA CRECER
Había una vez un pequeño árbol plantado en un jardín lleno
de hermosas flores y colorido verdor.
El sol, el agua y las mariposas eran sus grandes
amigos.
El árbol estaba feliz.
Pasaba su día conversando y jugando a mecerse a veces suave, a veces muy
fuerte. ¡Qué días maravillosos pasaban en el jardín!
Pero un día,
inesperadamente, alguien llegó y traslado
al pequeño árbol a un sitio que jamás había visto.
El arbolito estaba muy
entristecido por el cambio de lugar; dejó de estar feliz y se dijo a sí mismo:
- Ahora
no creceré-
El árbol encogió las pequeñas
ramas verdes y no dejó que los rayos del sol tocara sus hojas con su luz y tampoco
quiso que el agua refrescante llegara a su débil raíz.
El
sol estaba enojado; todos los días se acercaba y todos los días el arbolito lo
rechazaba. También su amiga el agua muy triste se encontraba y las bellas
mariposas no volvieron al lugar.
Pasados
algunos días el árbol empezó a morir.
- Mis
amigos ya no están – pensó.
Fue entonces cuando entendió y reconoció lo mal
que se había portado consigo mismo y con sus amigos.
Arrepentido de aquel mal comportamiento, abrió sus ramas y ramitas y por fin, ¡La luz
del sol! Su amigo nunca lo había abandonado.
Luego, su amiga el agua que estaba muy cerca
de allí, regó su seca raíz.
Las mariposas de colores infinitos
volaban celebrando al fin.
La alegría del árbol era muy grande y fue así como creció
y creció tan fuerte y tan grande, que los pajaritos, sus nuevos amigos,
anidaron en sus ramas. También muchas
flores y otras plantas crecieron allí.
Y pasados algunos años el árbol aun esta en el patio de
mi casa y yo juego y descanso siempre junto a él.
Fin