¿Qué es la escritura?
La escritura es un proceso mental complejo que tiene lugar en un contexto social, cultural e histórico específico en el que se desea comunicar alguna intención por parte de quien escribe, a través de signos convencionales o código.
Los niños quieren escribir. Quieren escribir
el primer día que asisten al preescolar.
En casa, y donde pueden, marcan paredes, hojas, periódicos con
creyones, tiza, bolígrafos o lápices, es decir, cualquier cosa que deje una
marca.
Los niños de hasta dos años hacen marcas en el papel para
expresar sus sentimientos y comunicarse con los demás. Aunque es posible que
los niños pequeños y los preescolares no escriban de manera convencional, demuestran
sus habilidades de escritura en una variedad de formas, como garabatear,
dibujar y haciendo formas en forma de letras.
Las formas en que los adultos responden a los primeros
intentos de escritura de los niños, puede alimentar o extinguir el deseo
natural de escribir de los niños; por lo tanto, es fundamental para los padres,
maestros, o responsables de niños, comprender las etapas importantes de desarrollo
de la escritura y fomentar actitudes positivas hacia la escritura. De allí la
importancia de saber instruir al niño en este proceso utilizando estrategias y métodos
adecuados para que la adquisición de la escritura sea satisfactoria, sin
revestir complejidad extra para el niño.
Los niños que no han recibido una correcta
instrucción ni se les han potenciado las habilidades para la escritura pueden
ser mostrarse evasivos y hasta pudiera aparecer una baja autoestima al “no
lograr hacer su trabajo de escritura”.
Es por esto que te propongo algunas
actividades previas a la escritura convencional para promover su desarrollo.
¿Cuáles actividades pueden ayudar a mejorar las habilidades de preparación para la escritura (pre-escritura)?
- Enhebrar y atar con cordones de diferentes tamaños.
- Actividades con tijera que pueden implicar recortar formas geométricas para luego pegarlas juntas para hacer dibujos como robots, trenes o casas.
- Modelar con plastilinas, usando rodillos o otros utensilios como palitos, cucharillas, otros.
- Armar diversos materiales: rompecabezas, legos, castillos de arena, otros.
- Ejercicios grafo motores.
- Dibujar o escribir en una superficie vertical.
- Actividades diarias que requieren fuerza en los dedos, como abrir recipientes y frascos.
- Juegos de dedos: que practican movimientos específicos de los dedos como tocar una flauta.
La escritura es un proceso mental complejo
que requiere comprensión, paciencia y amor; más cuando se trata de niños.
